La minería de Bitcoin sigue siendo uno de los temas llenos de misterios y leyendas dentro del mercado de las criptomonedas. Aunque en teoría cualquiera puede conectar una computadora a la red Bitcoin y comenzar a minar, la relación costo/beneficio no siempre es tan clara como las noticias te hacen creer.
Primero, quien quiere incursionar en la minería de Bitcoin necesita definir por qué quiere hacerlo, es decir, algo muy simple que impacta de lleno en todo lo que se hará luego del objetivo establecido. Después de todo, si su deseo es solo contribuir a la red y ayudar a Bitcoin a crecer, entonces está dispuesto a invertir dinero sin preocuparse por recibir ganancias.
Ahora, si su objetivo es obtener ganancias de la minería de Bitcoin, debe definir después de eso si la ganancia es a corto o largo plazo y si tiene el dinero para mantener el negocio en funcionamiento, si genera pérdidas o si necesita el dinero para ‘ pagar las cuentas’.
Si bien esto puede parecer una tontería, marca la diferencia porque minar Bitcoin, desde 2015, ya no es una tarea para ‘aventureros’. Consideraré aquí que desea obtener ganancias de la actividad minera y que necesita usar al menos el 50% de los bitcoins extraídos para pagar las facturas de operación. Bueno, considerando este caso, verás que minar bitcoin es más difícil de lo que parece.
Primero tendrás que comprar equipos específicos para minería, los famosos ASIC. Y cuando intentes hacer esto verás que no tienen un centro de información y mantenimiento de fácil acceso. Luego verás que el mercado de nuevos equipos lo controlan los asiáticos y, por último, verás que el precio es alto, sin contar que equipos de primera línea, como el Antminer S19 Pro, que tiene 200 TH/s (el doble del actual) solo se podrá comprar en Bitmain con pago adelantado y recibo del equipo solo en 2023.
Ni hablar de la energía que. Si no tienes un costo de energía por debajo de USD 0.03 por kilovatio/hora, encontrarás que ni el equipo más eficiente del mundo será rentable en el mercado actual. Y otra cosa muy importante, que también suena tonta, pero es muy importante: cualquiera que mina Bitcoin recibe Bitcoin. Entonces, si Bitcoin cae, entonces el valor en fiat recibido de la actividad minera también baja.
Entonces, después de considerar todo esto, debes saber que si colocas una máquina de minería Bitcoin en una habitación de 10 m2, el equipo generará tal calor que será casi imposible permanecer en el lugar, sin mencionar el ruido ensordecedor. Así que ni se te ocurra minar Bitcoin en casa usando un ASIC. En mi caso, cuando intenté hacer eso, mi esposa casi me echa de la casa y, al día siguiente, encontré mi maleta al lado del ASIC y me pidió que eligiera cuál de los dos objetos dejaría en la casa, la maleta conmigo o el ASIC.
Todavía queda por decir que,cuantas más máquinas conectadas a la red, más difícil es minar Bitcoin, que los usuarios necesitan conectarse, hay un grupo para aumentar las ganancias y que cada grupo cobra una tarifa. Y así sucesivamente.
Ethereum, DeFi y Bitcoin
Para solucionar este problema y facilitar la entrada de inversores ‘minoristas’ a este sector ya controlado por grandes mineros, han surgido varias soluciones en la industria de las criptomonedas como la minería en la nube. Cloud Mining es el proceso de minería de criptomonedas que utiliza un centro de datos remoto con poder de procesamiento compartido.
La minería en la nube ayuda a los usuarios a extraer bitcoins u otras criptomonedas sin tener que administrar el hardware. Los equipos mineros están alojados en una instalación propiedad de la empresa minera y a través de una interfaz web el usuario puede comprar ‘hashpower’, que es energía minera y, durante el período establecido, recibe una remuneración correspondiente a la energía minera comprada.
Sin embargo, aquí en América Latina ha surgido un nuevo modelo de minería de Bitcoin y Ethereum que utiliza contratos inteligentes en BNBChain y un protocolo de finanzas descentralizado, Light Minner.
La solución desarrollada fue la creación de una criptomoneda DeFi en la que el 10 % de las tarifas comerciales se dividen de la siguiente manera: 2 % de desarrollo, 1 % de titular, 1 % de quema, 1 % de liquidez y 5 % de las tarifas comerciales se dedican a construyendo granjas mineras de Bitcoin y criptomonedas.
Según explican los desarrolladores, se venderán todas las criptomonedas minadas por las granjas mineras del proyecto (nada se utilizará para la tenencia) y del valor en USD obtenido, el 50% se utilizará para la expansión y mantenimiento de las actividades mineras y el otro 50% (promocional), en el primer mes, se utilizará para comprar (en el mercado) la criptomoneda nativa del proyecto y distribuir los tokens a los titulares.
“Será como un staking de minería PoW. Es decir, cuando compras el token y lo mantienes, recibes recompensas por transacciones DeFi y también por la actividad minera de Bitcoin y otras criptomonedas PoW que estamos estructurando”, destacó Germano Sales, fundador del proyecto.
El proyecto se lanzó el 31 de marzo y el monto recaudado hasta el momento se utilizó para construir el complejo Minero y comprar tarjetas de video (la estructura inicial permitirá minar alrededor de 1gigaHash) (GPU) que se usarán no solo para minar Bitcoin sino otros Criptomonedas PoW.
“Elegimos comprar GPU y no ASIC para tener más flexibilidad en la minería. Con ASIC estás atrapado en Bitcoin, con GPU puedes usar protocolos como NiceHash y obtener más eficiencia del equipo según las variaciones del mercado. Además, comprar una GPU es un proceso más rápido y práctico que invertir en un ASIC, sin mencionar que prácticamente no hay ASIC disponible para entrega inmediata y también hay mucha dificultad con el mantenimiento y luego vender los ASIC en caso de que necesita actualizarse a equipos más eficientes.”
También según los desarrolladores del proyecto, el resultado del primer mes de minería se revertirá al 100% y se distribuirá a los participantes del ecosistema.
Fuente: cointelegraph.com